Nicolás Maduro, vistiendo uniforme militar y flanqueado por altos mandos castrenses, lanzó una advertencia sin ambages: Venezuela transitará “a una etapa armada y planificada con todo el pueblo” si Estados Unidos opta por una agresión. No obstante, al mismo tiempo tendió una mano conciliadora hacia Washington: “Respeto a Trump, lo invito a dialogar. Ojalá recapacite.”
Contexto y contenido del mensaje
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Movilización militar y militarización popular
El discurso fue pronunciado durante la puesta en marcha de más de 5 333 Unidades de Milicia al Combate, que según el gobierno integran un sistema masivo de defensa compuesto por más de 12 millones de combatientes entre nuevos alistados y milicianos. -
La oferta del diálogo ante la presión internacional
Aunque Maduro acusó a EE.UU. de fomentar un cambio de régimen —a través de “informes falsos” vinculándolo con el narcotráfico— insistió en la disposición al diálogo: “Venezuela siempre ha estado en la disposición de conversar, de dialogar, pero exigimos respeto.” -
Equilibrio tenso entre advertencia y conciliación
Las declaraciones dan cuenta de una estrategia dual: fortalecer la retórica beligerante frente a una hipotética agresión, mientras se abre un canal diplomático hacia Trump como una vía menos conflictiva.