El trágico incendio ocurrido en una tienda Waldo’s en Hermosillo, Sonora, ha dejado una profunda huella de dolor en la comunidad. Hasta el momento, las autoridades confirman 14 personas fallecidas, entre ellas familias completas, jóvenes estudiantes y trabajadores del establecimiento, quienes quedaron atrapados por las llamas y el denso humo.
El siniestro, registrado la tarde del lunes, se originó presuntamente en la bodega de almacenamiento, donde se habrían acumulado materiales altamente inflamables. A pesar de la rápida movilización de bomberos y cuerpos de rescate, el fuego se propagó con gran velocidad, colapsando parte del techo y bloqueando las salidas de emergencia.
Entre las víctimas se encuentran una madre y sus dos hijos pequeños, que se encontraban haciendo compras, además de cuatro empleados del turno vespertino y dos jóvenes universitarias que se refugiaron en los sanitarios buscando escapar del humo.
“Nunca habíamos visto algo así. El fuego se extendió en segundos. La gente gritaba, intentaba salir, pero las puertas estaban bloqueadas”, relató un testigo que logró ponerse a salvo.
La Fiscalía de Sonora informó que ya inició una investigación por negligencia y posible omisión de medidas de seguridad, luego de que se descubriera que el establecimiento no contaba con detectores de humo ni salidas de emergencia funcionales.
El Gobierno estatal decretó tres días de luto oficial y ofreció apoyo psicológico y económico a los familiares de las víctimas. En tanto, colectivos ciudadanos y organizaciones laborales exigieron una revisión nacional de protocolos de seguridad en tiendas y centros comerciales para evitar que tragedias como esta vuelvan a repetirse.









