En el marco del Día Internacional de Pez Sierra, una especie en estado «crítico» de extinción, el Acuario de Veracruz elevó un globo para conmemorar la fecha.
El director ejecutivo de Oceanos Vivientes, Ramón Bonfil, afirmó que este jueves y viernes se realizarán talleres y conferencias para hacer conciencia sobre su hábitat y la lucha para preservarlo.
«Después de mucho esfuerzo, planeación y trabajo hoy comenzamos la celebración del Día Internacional del Pez Sierra aquí en el Acuario de Veracruz».
Las conferencias audiovisuales y talleres manuales, todos realizados en el patio central de Plaza Acuario, son sin costo para quienes se interesen en participar.
El viernes a las 18:00 horas, una vez terminadas las actividades, se anunciará el nombre que le pondrán al ejemplar de Pez Sierra que tiene en cautiverio el Acuario.
En la inauguración que se llevó a cabo la mañana de este jueves se elevó un globo de helio con forma de Pez Sierra en el acceso principal a la Plaza, estará en el lugar los dos días.
El director ejecutivo de Oceanos Vivientes, Ramón Bonfil
El director ejecutivo de Oceanos Vivientes, Ramón Bonfil, ha solicitado en tres ocasiones a Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) actualizar la Norma Oficial Mexicana 059 para clasificar al Pez Sierra en peligro de extinción.
El especialista criticó que en México la especie esté todavía en categoría de «amenazada» mientras a nivel mundial ha sido nombrada en peligro de desaparecer.
Explicó que en todo el mundo hay cinco variedades de Pez Sierra; dos de ellas en peligro y el resto en peligro «crítico», es decir, «unas mal y otras muy mal».
«Las dos (especies) que tenemos en México desafortunadamente son de las que están muy mal, están al borde de la extinción, ya en sus últimos respiros».
Sin embargo, por omisión o falta de atención, desde hace 10 años la Norma Oficial Mexicana está mal informada y «atrasada» y no ha sido modificada pese a los constantes llamados que han hecho las organizaciones que le dan seguimiento al Pez Sierra.
«Yo ya metí desde hace cuatro años los estudios técnicos justificando que se debería de cambiar de especie amenazada a especie en peligro, pero desafortunadamente las autoridades de la Semarnat siguen arrastrando los pies».
